El cliente requería neutralizar los gases ácidos emitidos a la atmósfera.
Para ello, se necesitaba lavarlos con una solución alcalina con pH de 8.0 mínimo para neutralizarlos.
Tenían habilitado un sistema manual de neutralización del agua acidulada para el lavado de gases. Tanto la preparación de la sosa cáustica como su dosificación, se hacían manualmente. Esto ocasionaba muchas variaciones sin alcanzar los resultados requeridos.